Uno de los materiales de construcción más antiguos y utilizados en el mundo es sin duda el concreto. Su composición, sus características y la forma en que se formula, lo hace sin duda una de los materiales más resistentes en dureza, junto con otras propiedades cuando se utiliza el acero de refuerzo. 

Este material se utiliza para edificar y crear elementos como columnas, vigas, muros, piso, puentes autopistas, embalses y muchas otras estructuras. Del concreto se buscan características como trabajabilidad, cohesividad, resistencia y durabilidad.

El concreto se elabora con la mezcla de cemento, piedra, arena, agua y aditivos que dependiendo del tipo de estructura, se diseñan mezclas con distintas proporciones de sus componentes.

Al igual que muchos materiales, cuando se ven impactados por sustancias químicas o usos extremos, es necesario protegerlo para prolongar su durabilidad y buen estado.